Como “absolutamente indolentes”. Así calificaron a la directiva nacional del Colegio de Profesores los diputados de la Bancada UDI, Juan Manuel Fuenzalida y Sergio Bobadilla, luego que ratificaran que este miércoles y jueves paralizarán sus actividades a lo largo del país, argumentando el incumplimiento por parte del Gobierno a un petitorio de ocho puntos que presentaron tiempo atrás.

Al respecto, y si bien los parlamentarios gremialistas tildaron de “irresponsables” a los dirigentes del gremio docente, por llamar a un paro en medio de la grave crisis que vive el país en materia educacional, también emplazaron al Gobierno, y en específico al ministro Marco Antonio Ávila, a “no ceder ante el chantaje” de la directiva y a salir públicamente a condenar la suspensión de clases.

“Todo el país, y en especial los padres y apoderados, se han dado cuenta de que el Colegio de Profesores vive en una realidad absolutamente paralela y sólo están preocupados de defender sus propios intereses, sin importarles el grave daño que le generan a millones de estudiantes con este paro de 48 horas. Por lo mismo, en vez de hacerles entender lo perjudicial que significa esta paralización -que no lo van a hacer-, lo que uno esperaría es que sea el Gobierno el que salga públicamente a condenar este paro, entendiendo que estamos viviendo un verdadero terremoto que ya está teniendo graves efectos en la educación de los niños y jóvenes”, cuestionaron los UDI.

En esa línea, Fuenzalida y Bobadilla agregaron que “es inentendible que las actuales autoridades le sigan teniendo un temor reverencial al Colegio de Profesores”, advirtiendo que “tenemos el mayor nivel de deserción escolar en décadas, una fuerte baja en los resultados del Simce, una violencia desmedida en los establecimientos tradicionales y, pese a ello, el Gobierno se mantiene impávido frente a una paralización de dos jornadas, que perjudicará aún más los estudiantes de nuestro país”.

Por lo mismo, ambos parlamentarios gremialistas reiteraron su llamado al ministro Ávila a salir públicamente a rechazar el paro convocado por el Colegio de Profesores, asegurando que “si no lo vemos actuando de forma proactiva y en defensa de todos los alumnos de Chile, quedará demostrado que no es parte de la solución a la crisis, sino que al contrario, un verdadero problema”.

“Si el Gobierno quiere remediar, en parte, el grave daño que le generaron a la educación de nuestro país cuando fueron oposición, presentando una acusación constitucional contra el entonces ministro e impidiendo sistemáticamente al retorno a clases presenciales, lo mínimo que deberían hacer es salir a rechazar esta paralización de actividades y a cuestionar a este gremio, que a lo único que se han dedicado todo este tiempo es a boicotear la educación de los niños”, criticaron los legisladores.