La empresa automotriz Ford comenzó el retiro del mercado de más de 125.000 vehículos utilitarios deportivos en Estados Unidos por riesgos de incendio en el sector del capó.

En este sentido, la falla estaría relacionada con el modelo Lincoln MKC 2015-2019, el cual tendría un problema con un  sensor del monitor de la batería que puede hacer que algunos materiales se sobrecalienten, según ha anunciado la compañía en un comunicado.

Ford asegura estar al tanto de 19 informes de incendios bajo el capó, incluso con el vehículo estacionado y apagado.

Por ello, la firma ha aconsejado a los propietarios de estos vehículos que aparquen sus coches al aire libre y lejos de estructuras mientras que proporcionan a los concesionarios de la marca y a los minoristas piezas e instrucciones de reparación para resolver este problema.

En este contexto, la solución sería añadir un un fusible al circuito de alimentación del sensor del monitor de la batería para evitar estos posibles incendios.

Finalmente, Ford señaló que a pesar de estas fallas no se ha registrado ningún tipo de lesionados.