El senador del Partido Demócrata Cristiano, Francisco Huenchumilla, criticó fuertemente a su colectividad tras la renuncia de una serie de militantes denominados “históricos”.

En conversación con La Tercera, el parlamentario valoró la salida de los militantes que no se sentían comodos con el ideario y dirección del partido, sobre lo cual afirmó que “es sano que estas posturas se sinceren, porque no fue posible llegar a un acuerdo al interior del partido respecto de las distintas visiones que tenemos”.

“Es un sinceramiento que va en la dirección correcta de decirnos qué pensamos cada uno respecto del mundo político”, valoró.

En esta misma línea, consultado por la salida de Ximena Rincón y Matías Walker, quienes fueron rostros visibles de la campaña del Rechazo, indicó que “cuando los caminos se distancian, buscar un acuerdo para acercar los caminos no es posible, creo que no hay que seguir con esta tortura permanente, sino que simplemente separar los caminos”.

En ese sentido, el senador Francisco Huenchumilla aseguró que no descarta renunciar al Partido Demócrata Cristiano, debido a la colectividad “hoy día parece un barco sin timón, sin objetivos claros”.

“No quiero irme del partido, pero puede que exista algún resultado que me deje sin alternativa. Espero que no sea así”, añadiendo que “hemos visto sectores del partido que se derechizaron. Eso no adhiere con el ADN democratacristiano que tengo yo”.

Asimismo, cuestionó que el partido Demócrata Cristiano “no es relevante en el acontecer nacional. Mientras más controversias tengamos entre nosotros, el partido se vuelve intrascendente”.

“Si no tenemos un destino, un objetivo, entonces esto es un barco a la deriva. La gente dice: ¿Qué son los democratacristianos?. No son nada. Ese es el problema que tenemos”, cerró.