En respuesta al rechazo de indulto por parte del presidente Sebastián Piñera, el coronel (r) del Ejército, Carlos José Leonardo López Tapia, abandonó este lunes 12 el tratamiento que lleva desde hace tres meses en el hospital Militar, el que lo mantiene con vida.

La solicitud fue llevada a cabo el pasado 30 de octubre, por «razones humanitarias», sin embargo, el Mandatario la desestimó, lo que motivó la radicalización de parte del condenado por 14 secuestros calificados y tres homicidios calificados en casos relacionados a la Caravana de la Muerte, en 1973.

El hijo del interno de Punta Peuco, que cumple condena de 87 años, Carlos López, explicó que con esta decisión «sólo queremos demostrar la inhumanidad del ministro de Justicia», puesto que su padre presenta patologías cardíacas, renales y hepáticas.

Por su parte, el abogado Raúl Meza, defensor del oficial (r), las razones para solicitar el indulto “son de carácter estrictamente humanitario, en razón a su condición de enfermo crónico terminal y recientemente desahuciado por su equipo médico tratante”.

Cabe señalar que Carlos López Tapia también cumple condena por las desapariciones forzadas de Villa Grimaldi, centro de torturas que dirigió en 1976 como agente de la Dina.