Un positivo balance realizaron en la provincia de Quillota tras el paso del sistema frontal que afectó a la zona desde este miércoles 4 hasta el viernes 6 de julio.

En la zona registraron en promedio unos 40 milímetros de agua caída, lo que causó emergencias que fueron atendidas por equipos municipales, además del apoyo de personal de Vialidad y empresas de servicios.

Entre las contingencias producto de las lluvias, destacó el cierre de la ruta F-366, que une la localidad de Boco, en Quillota, con el sector de Lo Rojas, en La Cruz, debido a rodados. En el lugar trabajó personal de Vialidad que logró habilitar ambas pistas del camino.

Además se cerró el paso al tránsito vehicular en el badén Las Chacras, en Nogales, por aumento de caudal del estero del sector, situación que se normalizó horas después.

El gobernador Iván Cisternas indicó que «el balance es positivo y la provincia se ha comportado de manera normal. No tenemos damnificados. No fue necesario habilitar albergues y pasamos de buena manera el evento climático».