Este viernes, Estados Unidos confirmó que enviará bombas de racimo a Ucrania, esto pese a los cuestionamientos de algunos países miembros de la OTAN  y de organizaciones como Human Rights Watch (HWR).

En este sentido, se indicó que las bombas de racimo se incluyen en un nuevo paquete de asistencia militar a Ucrania del que se entregaran detalles durante la jornada.

De esta forma, el asesor de seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, afirmó que EEUU ha retrasado esta decisión todo lo que ha podido, pero explicó que las tropas ucranianas necesitan munición.

Por su parte, el general Mark Milley, respaldó la decisión de su país, argumentando que “el Ejército ruso ya ha utilizado este tipo de armas durante la guerra en Ucrania, mientras que las fuerzas lideradas por Zelensky también las han recibido por parte de sus aliados y desplegado”.

“Los ucranianos las han solicitado, otros países europeos han suministrado algunas, los rusos las están utilizando”, apuntó.

Cabe señalar que los cuestionamientos surgen porque más de cien países, entre ellos miembros de la OTAN como Francia y Alemania, se oponen al uso de bombas de racimo y han ratificado la Convención sobre Municiones en Racimo.