Las calles de Puchuncavi se tiñeron de morado, cánticos y carteles con la alerta morada que concentró a cerca de 500 personas, pidiendo justicia para Pascale Alvarado, la adolescente que en el 2011 fue presuntamente asesinada y cuyo cuerpo aún no ha sido encontrado.

A pesar del paso de los años, el caso cobra actualidad luego que la justicia imputara a Miguel Soto y Mario Ulloa como los presuntos autores del secuestro, violación y homicidio de la adolescente el 8 de noviembre de 2011.

La madre de Pascale pidió a los presuntos autores del crimen que por un acto de humanidad, a 9 años de aquel fatídico día, confiesen donde se encuentra el cuerpo de su hija.