Señor Director:

¿Qué ha sucedido? Frente a nuestros ojos el país ha sido invadido y se han argumentado un sinnúmero de pretextos que no se condicen con nuestra soberanía e independencia. Desde la Izquierda a la Derecha y desde la Catedral a la Gran Logia y con la pasividad de las Fuerzas Armadas, TODOS, sumisamente, han acatado las directrices del Nuevo Orden Mundial: La destrucción del hombre y de la mujer y de la familia; la destrucción de la patria, de las fronteras y de la soberanía; la destrucción de nuestra identidad y nuestra historia. El “Plan Caos”.

El resultado es ya previsible: Una gran masa de idiotas, sin “Dios ni ley” que sólo aspiran a saciar necesidades materiales artificiosas, a drogarse y alcoholizarse, a consumir lo que sea en el centro comercial más próximo, a “vivir” en la inexistencia de las “redes sociales” y a disfrutar de la “parrilla deportiva”… Todo esto, por cierto, engalanado a través de la programación de los medios de comunicación masiva como señales del “progreso, la libertad y la democracia” que encubren en realidad la decadencia, la esclavitud y una feroz tiranía.

La Gran Abominación.

En Chile –al igual que en Europa–, el “recambio poblacional” es una realidad astutamente disfrazada que significará, certeramente, la destrucción irreversible de nuestra nación.

Rafael Videla Eissmann