Luego de las polémicas declaraciones del ex comandante en jefe de la Armada, Edmundo González, quien planteó «aplicar la fuerza» contra Bolivia, el vicepresidente de aquel país, Álvaro García, analizó estos dichos y la postura chilena a sólo seis días de conocer el fallo de la Corte de Justicia de La Haya.

Además, el presidente (s) boliviano cuestionó las recientes declaraciones de autoridades del Gobierno de Chile, a quienes pidió esperar «con paciencia» el veredicto final del proceso, que se leerá el 1 de octubre.

A juicio de García, la lluvia “desorganizada y atolondrada” de declaraciones chilenas “lo único que hace es mostrar sus grandes problemas, su preocupación, quizás ante la inminencia de una derrota catastrófica de la diplomacia chilena”.

De igual forma, consideró que esta es “otra gran derrota porque la historia no se la puede ocultar, la verdad no se la puede ocultar indefinidamente. Tarde o temprano, la verdad y la justicia siempre prevalecen» e insistió en que «podrán pasar 50 o 100 años, pero esa justicia prevalece”.

El vicepresidente señaló también que “esta agresividad chilena muestra la enorme debilidad en la que se encuentra. Y simplemente decirles ‘tranquilos, muchachos, esperemos que el tribunal de La Haya se pronuncie y acatemos, cumplamos lo que ese tribunal vaya a definir’”.

Finalmente, García cerró diciendo que «no tenemos ningún tipo de animadversión contra el pueblo de Chile y siempre que nos vinculamos o hablamos de Chile estamos trabajando cómo mejorar nuestras relaciones en diversos escenarios como el económico y social».