Junto a la presentación de la contramemoria boliviana respecto a la naturaleza y el uso de las aguas del río Silala, el agente ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, Eduardo Rodríguez Veltzé, entregó una contrademanda, a pesar que desde el vecino país habían descartado tal situación.

Así lo comunicó esta jornada el presidente de Bolivia, Evo Morales, quien explicó detalles de esta acción llevada a cabo tres días antes de que venciera el plazo otorgado por el tribunal con sede en Holanda.

Al respecto, el Mandatario señaló que «nuestra contramemoria se funda en estudios realizados en la zona, que incluyen investigaciones geológicas, geofísicas, hidráulicas, hidrológicas, hidroquímicas y medioambientales, que confirman que el caudal considerable de las aguas del Silala fluyen artificialmente hacia el territorio chileno por las obras de canalización realizadas el siglo pasado».

En cuanto a la contrademanda, Morales explicó que se presentó «pidiendo que juzgue y declare que Bolivia tiene soberanía sobre los canales artificiales en los mecanismos de drenaje en el Silala, que están ubicados en su territorio y tiene el derecho a decidir cómo los mantendrá».

Y continuó su argumentación diciendo que su país «tiene soberanía sobre el flujo artificial de las aguas del Silala, que ha sido mejorado o producido en su territorio, y Chile no tiene derecho a ese flujo internacional» y agregó que «el uso del líquido debe estar sujeto a compensación».

Cabe recordar que en junio de este año, Morales había asegurado que su país optó por no contrademandar a Chile tras recibir una serie de recomendaciones jurídicas de expertos extranjeros. Sin embargo, esa postura cambió esta mañana, para sorpresa de todos.

Este juicio se inició luego que Chile presentara una demanda ante La Haya el 6 de junio de 2016, para que dicho tribunal declare al Silala como un río internacional y no como un manantial natural, como asegura Bolivia. En julio de 2017, nuestro país entregó su memoria para el litigio.