Las diferentes agrupaciones de gendarmes hicieron un llamado a sus compañeros de labores a acuartelarse a las 21:00 horas de este martes 26 de junio, con el objetivo de definir si paralizan sus funciones, luego que el Gobierno rechazara la mesa de trabajo exigida en un ultimátum enviado al Ejecutivo.

El Gobierno, a través del ministro de Justicia, Hernán Larraín, respondió a los gendarmes señalándoles que están abiertos al diálogos, pero que éste se debe efectuar con la directora de la institución, Claudia Bendeck, interlocutora que no es validada por los trabajadores de Gendarmería.

Una vez leída la carta enviada por el ministro Larraín, Andrés Segovia, tesorero de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), manifestó que el Gobierno «entregó una respuesta a nuestras demandas que no satisface al personal de Gendarmería».

Además, el dirigente sostuvo que «la carta no respondía a nuestras demandas de fondo y, por otro lado, tampoco se hacía cargo la autoridad máxima del Ministerio que ve el sector de Gendarmería, que es el ministro de Justicia».

En ese sentido, Segovia reiteró que «nosotros hemos señalado que hay demandas que superan la voluntad de gestión de la directora nacional».

Finalmente, explicó que «lo que estamos haciendo ahora es un acuartelamiento de todo el personal de Gendarmería a nivel nacional en las unidades penales especiales. Vamos a estar evaluando responsablemente los pasos a seguir. Nosotros no nos hemos cerrado aún al diálogo con el ministro».