En medio de la huelga que llevan a cabo los médicos de Bolivia, decidieron tomar el control de una carretera del oriente y se enfrentaron a la policía, que despejó la ruta por la fuerza, en medio de prolongadas protestas callejeras contra el gobierno en rechazo de una reforma que endurece las penas por mala praxis.

Los galenos bloquearon la ruta que une la ciudad de Santa Cruz con regiones del sureste y con Argentina, en un esfuerzo porque el presidente Evo Morales escuche sus exigencias.

En La Paz, miles de médicos y estudiantes de Medicina marcharon en la jornada por el centro de la ciudad por la misma causa e intentaron tomar el Ministerio de Salud, pero la policía repelió a los manifestantes. Las protestas, que llevan más de un mes, no cesaron ni siquiera durante la celebración de la Navidad.

Morales ha rechazado dialogar bajo presión y ha convocado a los médicos a suspender las protestas para retomar las negociaciones que hasta ahora fueron infructuosas. Sin embargo, los médicos rechazan desmovilizarse.