Chile obtuvo un respiro en la Copa América Centenario al derrotar a Bolivia por 2-1 con un penal convertido por Arturo Vidal en el décimo minuto de prolongación un resultado que dejó a su rival prácticamente eliminado.

Vidal abrió el marcador para Chile en el arranque de la segunda parte, Jhasmani Campos empató en el 60 con un golazo de falta por la escuadra, y Vidal, de nuevo, desde el punto de penalti, firmó el tanto del triunfo en el último suspiro.

A pesar del resultado favorable, Chile acrecentó las dudas que deja su juego. Su presentación supo a poco, el campeón no fue capaz de descifrar cómo abrir el candado boliviano y fue demasiado lento y previsible en sus planteamientos ofensivos.

Con la victoria Chile subió a cuatro puntos y llega a la tercera jornada con sus posibilidades de clasificación intactas.