Se llevó a cabo este martes un encuentro entre el Gobernador Regional, Rodrigo Mundaca y 28 alcaldes y alcaldesas de la Región de Valparaíso tras darse a conocer el Presupuesto 2024.

Mundaca anunció que junto a los jefes comunales, concejos municipales, vecinos y organizaciones de la región, macharán a La Moneda por el “mezquino” presupuesto que será otorgado a “la región más importante”.

A esto agregó que “Estamos hablando de un presupuesto mezquino, un presupuesto que va a afectar directamente en los empleos de la región, porque los programas de ProEmpreo no los vamos a poder mantener, porque el ministro de Hacienda nos dijo que no había recursos”, argumentando además que “eso significa que va a tener más de 2.200 mujeres trabajadoras en primero de enero del 2024 desempleadas en la región”.

Además, recalcó que no van a poder realizarse “asignaciones directas vía proyecto de interés regional y, por lo tanto, se van a ver afectadas todas aquellas prácticas culturales”, por lo que criticó que “va a ser la burocracia la que nuevamente se va a instalar en nuestra región”.

“Estamos ante una situación completamente regresiva en lo político porque en definitiva este Gobierno tiene solo dos opciones: se transforma en el sepulturero en el proceso de descentralización o comprende que la descentralización puede cambiar la vida de las personas”, resaltando que “nuestra región no merece el trato que nos han dado”.

“Estamos absolutamente maltratados, más aún cuando entre un 70 y un 80% de la ejecución presupuestaria de los municipios depende de los recursos del Gobierno Regional y hoy día lo que se nos está presentando no es solamente mezquino, sino que no se condice. Pareciera que las autoridades del Gobierno central no conocen la importancia que tiene la Región de Valparaíso”, acotó.

Por todos estos hechos, se marchará a La Moneda “la próxima semana y vamos a ir con el conjunto de alcaldes y alcaldesas, concejales y concejalas y organizaciones sociales. Y lo voy a decir como lo he dicho en otras ocasiones: Nos escuchan a la buena o nos escuchan a las malas”, zanjó.