El alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, abordó durante esta tarde la decisión de la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN) de no autorizar el uso de fuegos artificiales para fiestas de Año Nuevo en Viña del Mar y Valparaíso.

Al respecto, la autoridad comunal señaló que la imposibilidad de lanzar pirotecnia en la comuna para la fiesta de fin de año es “un balde de agua fría”, por lo cual ya se encuentran viendo cual será el plan de acción para tratar de reducir los efectos que esto tendrá en el rubro del turismo y el comercio.

Junto a ello, el edil anunció que presentará acciones legales indicando que la ciudad “no se va a quedar con los brazos cruzados, como municipio vamos a exigir lo que nos corresponde”.

“Acá hay un proveedor que incurre en un grave incumplimiento, aquí hay una demora de las instituciones del Estado de haber reaccionado a una petición que se hizo desde el momento que el municipio toma conocimiento de estos hechos”, apuntó.

En esta línea, Sharp exigió a las autoridades transparencia sobre la decisión adoptada, indicando que “esta se explique bien”, dado que esta es “una decisión que entiendo se tomó por razones de seguridad, que yo puedo compartir, pero es una decisión que genera un impacto muy grande y que tiene que estar suficientemente justificada”.

Finalmente, el jefe comunal indicó que a pesar de este revés el municipio seguirá adelante con la fista de tres días en la Plaza Sotomayor y el show de luces en algunos puntos de la ciudad. Además, señaló que mañana sostendrá una reunión con el gremio del turismo para ver alternativas que permitan retener y activar la llegada de visitantes a la comuna.