El empresario y «coleccionista de arte», Raúl Schüler, quien mantenía en su propiedad de San Francisco de Mostazal una serie de esculturas extraídas de Santiago y Valaparaíso, está cumpliendo arresto domiciliario total y arraigo nacional por orden de la Fiscalía.

Sin embargo, según señaló recientemente La Tercera PM, la defensa del empresario acudió al Tribunal Constitucional solicitando «dilatar» dicho proceso que, recordemos, consiste en infracciones a las leyes de Monumentos Nacionales y de Control de Armas y Municiones.

Carlos Corté, abogado de Schüler, señaló en su petitorio que «mi representado es una persona de la tercera edad, con una irreprochable conducta anterior», argumentando, además, que se pasan a llevar los principios de igualdad y de no discriminación.

«Lo hacía por el bien del país»

 Según el medio citado, en su declaración tomada el 21 de diciembre del año pasado, Raúl Schüler dijo que desconocía el origen de las armas y de las obras de arte que había adquirido a diversos anticuarios por altas sumas de dinero, cuyo objetivo final era, según sus palabras, «preservar el patrimonio del país».