La Agencia Nacional de Gestión de Desastres de Indonesia (BNPB) informó que el número de víctimas mortales producto del terremoto de magnitud 7,5 y posterior tsunami en la isla de Célebes, en Indonesia, asciende a 1.234. El anterior balance era de 844 fallecidos.

El portavoz de la BNPB, Sutopo Purwo Nugroho, indicó que, además, hay 799 heridos graves ingresados en distintos centros hospitalarios y que 26 países y dos organizaciones internacionales han ofrecido ayuda. El vocero también explicó que el aumento de víctimas fatales se debe a que los equipos de rescate han entrado en zonas que estaban inaccesibles desde el viernes.

En este contexto, el portavoz del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Christoph Boulierac, advirtió del riesgo de que se trafique con menores que han sobrevivido a la catástrofe y de que puedan ser víctimas de abusos sexuales.

Entre las víctimas halladas en las últimas horas, se encuentran los cuerpos de 34 estudiantes de Teología, que fueron localizados en una iglesia en el sur de Célebes, devastada por un alud causado por el terremoto, según dio a conocer la Cruz Roja local.

Aulia Arriani, vocera de Cruz Roja, sostuvo que «se habían declarado desaparecidos 86 estudiantes, que participaban en un retiro religioso en el distrito de Sigi Biromaru. El problema más importante es moverse a pie en el barro durante hora y media, transportando los cuerpos».

Hasta el momento, unas 153 víctimas mortales fueron enterradas en fosas comunes para evitar la descomposición de los cuerpos, mientras que se teme que pueda haber cientos de muertos enterrados en las ruinas y bajo el barro de los corrimientos de tierra.