El Gobierno, a través del ministro del Interior, Andrés Chadwick, rechazó las presiones ejercidas por funcionarios de Gendarmería, quienes este lunes 25 entregaron un ultimátum de 24 horas el Ejecutivo para que se sienten a conversar con ellos respecto a sus demandas.

En ese sentido, el jefe de gabinete sostuvo que «este no es un Gobierno con debilidades ni que se deje someter a presiones. Se respeta la autoridad».

Además, indicó que «saben que el respeto a la autoridad es conversar inicialmente con la directora de Gendarmería, para efectos de conversar, dialogar y ver sus problemas».

Chadwick planteó también que «las puertas de este Gobierno están abiertas para efectos del diálogo, la conversación, el sentarse en una mesa, discutir los problemas que pueda tener una institución tan importante. Por tanto, presiones o amenazas de paros o huelgas no corresponden».