El Papa emérito, Benedicto XVI, (90), quien vive en un pequeño monasterio desde 2013 al interior del Vaticano, se refirió a su estado de salud actual.

A través de una carta enviada al diario italiano Corriere della Sera, Joseph Ratzinger explicó que «puedo decir sólo que, en el lento disminuir de las fuerzas físicas, interiormente voy en peregrinaje a casa».

Además, indicó que «me ha conmovido que tantos lectores de su periódico hayan querido saber cómo transcurre este último periodo de mi vida».

«Es una gran gracia para mí, en este último tramo de camino -a veces un poco fatigoso- verme circundado de una bondad y un amor que no habría podido imaginar», dijo Ratzinger.

Finalmente, Benedicto XVI escribió que «en este sentido, considero la petición de sus lectores como una forma de acompañarme en este tramo del camino. Por ello no puedo sino agradecérselo y asegurarles por mi parte, la oración por todos vosotros. Cordiales saludos».