La exigencia del mundo laboral y las competencias han abierto la necesidad de escalar en el ámbito profesional, pero  los tiempos parecen ser limitados. Sin embargo, las nuevas tecnologías se han adaptado al acelerado ritmo de vida y han abierto una importante puerta para las empresas y sus trabajadores.

La formación académica virtual ya es una realidad. Un verdadero Campus Virtual donde estudiantes y tutores de cualquier parte del mundo pueden interrelacionarse a través de la red, compartiendo conocimiento y conformando una verdadera Comunidad Universitaria Internacional. Esto es lo que ha permitido el desarrollo de las nuevas tecnologías y nuevos modelos de aprendizaje, que hacen posible una formación práctica y de calidad con la flexibilidad de horarios y espacios que los ejecutivos de hoy día necesitan.

Un buen ejemplo del uso de las nuevas tecnologías aplicado a la educación es Instituto Europeo de Posgrado. Esta escuela de negocios española con sede en Chile está impartiendo formación a medida de cada empresa y de cada empleado, a través de una educación 100% online y no sólo con una flexibilidad horaria compatible con la actividad laboral, sino también con un ahorro importante de costos, al no requerir gastos de desplazamiento.

La educación en línea aprovecha las herramientas más innovadoras en sus plataformas virtuales, donde los alumnos y alumnas pueden aprender de forma práctica e interactiva con tutores y profesores que realizan un seguimiento constante de sus estudiantes, enseñando y entregando conocimientos a través de casos prácticos, ejercicios interactivos y videos explicativos, clases en tiempo real a través del computador y simuladores empresariales.

El inglés se ha convertido en idioma universal y, prácticamente, vital en la formación de los profesionales. Es por eso que algunas instituciones aprovechan también todas las ventajas del internet para enseñar el idioma de Shakepeare a sus alumnos. Un ejemplo es el British Council que ofrece cursos de inglés online disponibles desde computadora y celular.

Gracias a las nuevas tecnologías y el internet, la educación y el ámbito laboral ya no son opuestos, sino que un complemento, dejando de ser necesaria la presencia física de los alumnos y primando la comunicación y la interactividad. Todo esto redunda en una mayor facilidad de aprendizaje y una mayor participación de los alumnos.