Gastar el aguinaldo y/o comprar al contado. Estas son las dos principales recomendaciones que entrega el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) a los chilenos que vayan a realizar sus compras navideñas; esto, con la finalidad de no tener que endeudarse y que esta fiesta religiosa mantenga su espíritu original.

El fin de año para muchos chilenos no es sinónimo de relajo o del cierre de una etapa, sino que paulatinamente se ha ido transformando en una vorágine consumista por adquirir productos para regalar a sus seres queridos. Y esto es algo que no sólo se puede apreciar en nuestro país, ya que en todo el mundo la fiebre por el ofertón ha ido dejando atrás el verdadero sentido de la Navidad.

Por ello, el organismo defensor de los consumidores ha entregado una serie de recomendaciones para que los chilenos tengamos sumo cuidado a la hora de nuestras compras: gastar el aguinaldo o lo que se tenga en el bolsillo. Pero si va a solicitar un crédito, llaman a cotizar exhaustivamente, pues estudios del Sernac comprobaron que una persona puede terminar pagando casi el doble de lo que pidió.

“Entre las recomendaciones que damos es a tener un consumo inteligente y responsable y gastar dentro de nuestras posibilidades, es decir, al contado o con el aguinaldo. Y si es necesario sacar un crédito, recomendamos cotizar y comparar para que éste no salga tan caro, ya que no hay crédito gratis”, explicó Nicolás Corvalán, director regional de Sernac.

Juguetes

Acerca de los juguetes, desde el Sernac recomendaron comprarlos sólo en el comercio establecido y así no arriesgar a los más pequeños de la familia con productos inseguros. Junto a esto, plantean que muy importante guardar la boleta para exigir la garantía legal del producto, en caso que este presente alguna falla. Lo otro en este punto es observar bien el rotulado, que venga en español y que tengan toda la información correspondiente.

Respecto a la garantía legal de los distintos productos adquiridos que presenten algún problema, Sernac informó que los consumidores tienen derecho a tres opciones para ejercer la garantía legal: cambiar el producto, recibir una reparación gratuita o la devolución de lo pagado. Estas opciones se aplican durante los tres primeros meses desde la compra y es el consumidor quien elige cuál de esas opciones prefiere. Por ello, esto se conoce popularmente como “3×3”.

Frente a esto, el director regional de Sernac, Nicolás Corvalán, dijo que “la ley del consumidor señala que tenemos el derecho a la calidad de los productos y que nos protege cuando estos presentan fallas. Se llama 3 x 3 porque durante tres meses, desde la compra o recepción del producto, hay 90 días (3 meses) para que -ante fallas- podamos repararlo, cambiarlo o anular la compra”.

Comportamiento sociológico

¿Pero a qué obedece esta fiebre por las compras? A juicio del sociólogo de la Universidad de Valparaíso, Félix Aguirre, hay dos temas que convergen en la Navidad: “Primero está la tradición religiosa, que es muy importante y que no tiene mayor explicación, ya que no añade nada que no sepamos y que está dentro de lo que es nuestro sentido. Por cierto, no tengo ninguna objeción al respecto”.

El profesional agregó que el tema “se ha transformado en un objeto de consumo, a tal punto que se desnaturaliza el presente navideño, el que debería ser más modesto y simbólico que una ostentación como se hace ahora. En este sentido, creo que lo hacemos como una forma de subsanar nuestro compartimiento durante el año, subsanar lo que no se ha hecho durante el año, cosa que de todas maneras no está del todo mal”.

Por último, finalizó diciendo que “otra cosa es el negocio en torno a la Navidad, que eso sí me parece preocupante, ya que debería hacernos interrogar más sobre el lugar del consumo y la relación que tenemos con el dinero en una fecha como esta, que es de todo menos consumista”.