lorenzini El presidente de la Comisión de Hacienda, Pablo Lorenzini, y el presidente de la Comisión de Deportes, Jaime Pilowsky, informaron hoy que el proyecto que modifica la ley de violencia en los estadios, quedó listo para ser votado por la Cámara de Diputados.

 Al respecto, el diputado Lorenzini explicó que “tras ser despachada de la Comisión de Deportes, la denominada Ley de Derechos y Deberes de los Espectáculos Deportivos, fue analizada y votada en la Comisión de Hacienda, y ahora pasa a la sala para ser analizada por los diputados y finalmente votada; es un muy buen proyecto”.

 Por su parte, el diputado Jaime Pilowsky valoró el trabajo realizado por la Comisión de Hacienda, señalando que “este proyecto, que recoge mociones parlamentarias, ha sido conversado con todos los sectores y estamos seguros que será una herramienta eficaz y eficiente para combatir la violencia que hemos presenciado con especial fuerza en el último tiempo en los recintos deportivos, y, también , en las actividades vinculadas. Ojalá podamos votarlo pronto en sala para que lo vea el senado y así, en breve plazo, contra con una buena ley que  devuelva los espectáculos deportivos a las familias”.

 EL PROYECTO

 La nueva iniciativa contempla, entre otras normas,  un estatuto del hincha, nuevas facultades para los Intendentes, sanciones para los organizadores que incumplan la ley, el delito de secuestro de buses y la incorporación como falta de expresiones racista.

El estatuto del hincha reúne un catálogo de derechos para quienes asistan a los partidos de fútbol profesional. Acá se incluye que haya accesos especiales para los espectadores que asistan con menores de edad, mujeres embarazadas y personas en situación de discapacidad.

En cuanto a la Intendencia, esta podrá sancionar las infracciones que cometan los clubes o los organizadores de los espectáculos deportivos cuando no se cumpla la ley o las instrucciones de la Intendencia. Las multas al respecto irán desde las 5 a las 1000 UTM.

Además, será de competencia de la Intendencia rechazar la reprogramación de un espectáculo deportivo, o revocar su autorización, si las condiciones de seguridad y orden público lo ameriten.

En cuanto al secuestro de buses en el marco de un evento deportivo de fútbol, incluye penas que van desde los tres años y un día, hasta los cinco años.