Fiscalía dio a conocer que autoridades colombianas detuvieron a siete integrantes de un grupo conocido como el “Clan Familiar”, acusado de reclutar a mujeres jóvenes para ser explotadas sexualmente en el sur de Chile.

Las mujeres, de acuerdo a lo informado eran reclutadas en sectores vulnerables de Manizales, capital de Caldas, “con falsas expectativas laborales las convencían de viajar a Chile para someterlas a tratos inhumanos y explotarlas sexualmente”.

En un comunicado, se indica que “Al parecer, les tramitaban los pasaportes, les proporcionaban los boletos aéreos para trasladarlas de Pereira a Bogotá, y, posteriormente, a Chile donde les retenían los documentos y las ubicaban en casas de proxenetismo en las ciudades de Osorno, Puerto Montt y Temuco”.

Fiscalía obtuvo 350 audios para “detectar el entramado criminal”, confirmándose que son 27 las víctimas, a quienes les fijaban una deuda de cinco millones de pesos por gastos de pasajes aéreos, deuda que se iba acrecentando por gastos de alojamiento.

Las mujeres habrían permanecido “encerradas en inmuebles, hacinadas en una pequeña habitación en medio de precarias condiciones de salubridad que atentaban contra su dignidad personal. En esos mismos recintos habrían sido obligadas a sostener relaciones sexuales con hombres que las contactaban a través de dos sitios web”.

Las jóvenes fueron obligadas a “grabar videos con contenido explícito mostrando la cara y aseguraron que los registros obtenidos eran usados como método de intimidación para que no escaparan, en el entendido de que la estructura ilegal los enviaba a sus familiares para generar vergüenza y a las autoridades migratorias de Chile para que fueran detenidas y expulsadas”.

Cinco de las siete personas detenidas forman parte de una misma familia, negando todos los procesados los cargos, quedando en prisión preventiva.