Un doble decomiso de armamento ilegal y municiones de grueso calibre ha realizado en los últimos días autoridades argentinas, las que tenían como destino Chile.

La situación ha provocado inquietud en los senadores RN de La Araucanía, Carmen Gloria Aravena y José García Ruminot, quien calificaron de “extremadamente grave” lo ocurrido en el país vecino,  dado que a su juicio “pareciera haber un tráfico de armas permanente hacia Chile en un contexto donde ha recrudecido la violencia terrorista, y por lo mismo, es fundamental que el Ejecutivo recabe los antecedentes con el gobierno argentino, que permitan determinar la procedencia y destino de ese armamento, ante el riesgo de que termine en manos de peligrosas organizaciones criminales que operan en nuestra región”.

Los legisladores manifestaron también su profunda preocupación por el silencio del gobierno y el ministerio del Interior en torno a estos decomisos de armas de guerra provenientes de Argentina. “Igual de grave es que podrían no ser los únicos decomisos, ya que no sabemos si han ingresado armas de contrabando anteriormente, ni cuántas, pero sí sabemos que hay existe crimen organizado en La Araucanía, que utiliza armamento de guerra, lo cual provoca profundo miedo en la población”.

En esa línea, la Senadora Aravena agregó que “tampoco tenemos claridad de si el destino del armamento decomisado sería La Araucanía o también estarían llegando al norte, ni si provienen de Argentina o de otro lado, por lo que necesitamos que el gobierno responda, porque esto no puede pasar inadvertido y no vemos mayor preocupación del Ejecutivo en los temas de seguridad”.

De hecho, Aravena recordó que recientemente se incautaron armas en una bodega del juzgado de Traiguén, donde luego de una sanitización que se realizó al recinto, se encontraron 5 rifles, 10 pistolas y 5 revólveres, siendo el mismo tribunal al que pertenecía el ex oficial de sala, Juan Pablo Pirce, quien fue detenido el 5 de abril pasado con un arsenal en su casa.

Por su parte, el Senador José García Ruminot indicó que “hemos enviado este oficio y esperamos las diligencias del gobierno chileno con las autoridades y policías argentinas, de manera de saber exactamente cuál es el alcance de estas dos denuncias. No nos podemos quedar tranquilos mientras se conoce este tipo de información que afecta gravemente la seguridad y tranquilidad de los chilenos y de los habitantes de la Macrozona Sur. En este caso, tendrá que intervenir la Cancillería chilena, para así conocer lo que está ocurriendo”, concluyó el Senador.