El diputado PPD, Rodrigo González, ofició al Director Nacional de la Junaeb, para que se intervenga, fiscalice y aplique las sanciones que corresponda en caso de ser necesario a la empresa concesionaria “Salud y Vida”, encargada de brindar el servicio de alimentación a diversos recintos de la V Región y según denuncian las propias trabajadoras, están incumpliendo los contratos y entregando un servicio absolutamente deficiente.

Según aseguró María Cortés, presidenta regional del Sindicato Regional Interempresas de Manipuladoras de Alimentosdurante el último tiempo no han llegado los insumos necesarios a los establecimientos educacionales de acuerdo a la minuta de alimentación para los alumnos, faltando productos como verduras, tallarines, huevos, carne, y que son esenciales para la correcta nutrición de los estudiantes. Junto a ello la vajilla e implementación de los jardines infantiles como ollas y cocinas, se encuentran en muy malas condiciones, no ha sido renovada como corresponde, y tampoco se han entregado zapatos de seguridad, uniformes de trabajo ni el segundo delantal, deficiencias que no permiten entregar un servicio de calidad”.

Para el diputado González, la empresa también ha caído en prácticas antisindicales que deben ser esclarecidas por la Junaeb, respecto a los bonos pactados y descuentos aplicados en los sueldos de las trabajadoras. “La empresa Salud y Vida ha infringido las normas y las condiciones de los contratos de concesión. Estos incumplimientos son frecuentes y además están pagando atrasados los beneficios pactados en los contratos como los aguinaldos, los cuales debían pagarse en agosto y noviembre, pero que la empresa anunció los pagaría recién este 19 de diciembre, y lo peor es que como represalia a la marcha que realizaron las manipuladoras el pasado mes de noviembre, les descontó a 250 trabajadoras 1 día de pago correspondiente a 18 mil pesos, buscando amedrentar las legítimas manifestaciones”.

Dentro de las demandas que emanaron en la última asamblea, según María Cortés, también se solicitó a la Junaeb realizar un estudio sobre las enfermedades profesionales que las afectan y las coberturas que debieran aplicarse. Se necesita que se implemente y realice un estudio sobre los principales problemas que afectan a las trabajadoras como tendinitis, várices, hernias lumbares, sobrecarga laboral, estrés, debido a las consecuencias de las condiciones en que se realizan nuestras labores. Además el seguro médico que tenemos solo cubre el 50% de las enfermedades, el resto debe ser cubierto por recursos propios lo que a nuestro juicio debe ser modificado en los próximos contratos de concesión”.