El avance de la tecnología disminuyó la cantidad de “trabajos pesados” y aumentó aquellos más sedentarios en donde diariamente la persona debe permanecer sentado más de 6 horas diarias. Esta modalidad de trabajo puede ocasionar problemas de salud por postura incorrecta como pueden ser dolor de espalda o en el cuello. Ahí radica la importancia de contar con una silla ergonómica en nuestra oficina. 

Una silla ergonómica brinda descanso adecuado a las partes del cuerpo más propensas al estrés y dolor en la jornada laboral. A continuación, veremos en detalle los beneficios de comprar una. 

Beneficios de la silla ergonómica

El principal beneficio es trabajar más cómodo y lograr que la postura sea la mejor para prevenir molestias.

La persona que debe realizar actividades sentado durante largas horas se verá beneficiada por el confort que la silla ergonómica le brindará a su cuerpo. Así se reduce la tensión ya que el usuario puede mantener una postura perfecta durante un período de tiempo más largo.

Las sillas ergonómicas son mucho más cómodas que las sillas de trabajo normales, ya que cada silla está diseñada teniendo en cuenta los hábitos, la personalidad, los rasgos y la línea de trabajo del usuario. Por lo tanto, tales sillas brindan mucha comodidad a las personas, ya que son extremadamente fáciles de usar.

La persona cuya línea de trabajo involucra sentarse en una silla por más horas probablemente desarrollará un problema de cuello a largo plazo. Es así que el uso de sillas ergonómicas reduce dichas dificultades, ya que le da a su cuello un soporte adecuado, que a su vez disminuye la cantidad de tensión que generalmente se experimenta. También evita problemas complicados como la espondilosis cervical, que comienza desde la mera rigidez en las áreas del cuello y los hombros.

Las sillas ergonómicas brindan al usuario una opción de respaldo completo, que no solo soporta su columna vertebral, sino que su función reclinable le permite estirar la espalda hasta más de 120 grados. Esto resulta en menos quejas de dolor de espalda.

Sentarse en una silla normal provoca una enorme cantidad de presión en la cadera y los glúteos. Estos problemas pueden reducirse mediante el uso de sillas ergonómicas, ya que están hechas de material blando que pone menos presión en estas áreas.

Tips para realizar una buena compra 

  1. Diseño ergonómico: es importante revisar que la silla sea ergonómica y no confundirlas con las sillas de escritorio tradicionales. La función principal es que el usuario mantenga la espalda recta y hombros alineados. El respaldo tiene forma de S para simular la columna vertebral y evitar malas posturas. 
  2. Personalización: es necesario que la silla cuente con secciones ajustables para poder adaptarlas a cada usuario. No sólo es importante el respaldo inclinable sino también ajustar los reposabrazos para que se amolden a las distintas alturas de los escritorios. 
  3. Comodidad ante todo: la superficie debe ser cómoda, aportar confort y ser suave al tacto. Un dato a tener en cuenta es que los bordes redondeados son ideales para no maltratar  la piel del usuario.El tejido del respaldo y del asiento se recomienda que sean tapizados con un tejido transpirable o contar con un diseño en el que el aire pueda fluir. Así, se reduce la sensación de calor y, por consiguiente, la sudoración excesiva. 
  4.  Movimientos libres: la silla ergonómica debe contar con una base sólida y ruedas pivotantes para facilitar el movimiento. Para evitar marcas en el suelo, se puede optar por una con ruedas plásticas o recubiertas con goma.

Ahora que sabes todos los beneficios de las sillas ergonómicas y cómo pueden cuidar de tu salud, ¿qué esperas para obtener la tuya?. Utiliza los tips para una buena compra y adquiere la ideal para ti.