A finales del mes de julio, el hallazgo del cuerpo de una mujer de 91 años, con data de fallecimiento de al menos una década paralizó a la ciudad de Curicó.

El asombro fue aún mayor ya que la hija de la adulta mayor siempre dijo que su madre se encontraba internada en un hogar de reposo.

Según consigna la revista Sábado de El Mercurio, la hija de la mujer de 91 recibió desde el 2009 al 2017 la pensión de su madre.

“Desde Capredena, cuentan que Ketty Cáceres siguió recibiendo, hasta junio de 2017, su montepío como familiar de un funcionario del Ejército fallecido, y que ascendía a 576 mil pesos brutos mensuales. Desde la institución explican que desde 2009 el pago se hacía a la hija de la beneficiaria, un trámite que debía renovarse cada dos años”, indicaba el reportaje.

En el año 2017, la mujer presentó los papeles para renovar la pensión, los que deben llevar la firma y timbre de un oficial del Registro Civil, pero en su lugar, llevaban los de un notario, por lo que se rechazó el pago de la pensión.

Luego de confirmarse que se trataba de un notario falso, se interpuso una denuncia en la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, la que siguió su curso en Curicó, siendo posteriormente archivada.

Actualmente, luego del descubrimiento de la muerte de Ketty Cáceres, la fiscal del caso, Lucy Bustamante, solicitó sumar este antecedente al caso.