Luis Arce, representante del partido socialista (MAS) asumió este domingo como el nuevo presidente de Bolivia, haciendo un llamado a la reconciliación entre los ciudadanos del país.

El encargado de tomar el juramento de Arce en la sede del Congreso boliviano, fue el vicepresidente David Choquehuanca, quien también es el líder de la Asamblea Legislativa.

De esta manera, el ex ministro de Economía de Morales, asume la presidencia de Bolivia en medio de un clima de fiesta por parte de sus seguidores, varios grupos de indígenas que se reunieron de manera anticipada en los alrededores del Legislativo bailando danzas folclóricas de las distintas regiones bolivianas, al igual que protestas callejeras de distintos grupos opositores.

Arce, de 57 años, tendrá como grandes desafíos enfrentar una crisis sanitaria y social que se encuentra potenciada aún más por la pandemia del Covid-19 que aún no ha sido erradicada del país.

A la toma de posesión asistieron el Rey Felipe de España y los presidentes Alberto Fernández de Argentina, Iván Duque de Colombia, Mario Abdó Benítez de Paraguay y el canciller de Irán, Mohammad Yavad Zarif, así como también el expresidente Carlos Mesa, quien luchara contra Arce en las elecciones del 18 de octubre pasado.