El delantero chileno, y uno de los goleadores históricos de la Roja, protagonizó un nuevo problema disciplinario en su carrera, luego de enfrascarse en una discusión con su director técnico, Ricardo Ferretti, durante la práctica de su club, el Tigres de México.

Según aseguró el propio presidente de la escuadra azteca, «Turboman» se cansó de los constantes retos de su entrenador y decidió encararlo en plena práctica, a vista y paciencia del resto de sus compañeros de plantel.

En concreto, Vargas y Rafael Carioca, uno de sus mejores amigos al interior del plantel, recibieron una serie de reproches debido a que el DT consideró que estaban haciendo una acción de más en la práctica ofensiva del club felino.

Debido a esta nueva polémica que enfrenta el chileno, fue separado del plantel, por lo que esta jornada entrenó de manera apartada a sus compañeros.

Al respecto, el presidente de Tigres, Miguel Ángel Garza, indicó que «es una cuestión positiva, de unión de grupo, que se den este tipo de fricciones. La exigencia que está queriendo el cuerpo técnico y qué bueno que haya este carácter dentro de la cancha para sacar las cosas adelante».