El Papa Francisco decidió quitarle el estado clerical a Francisco José Cox Huneeus, arzobispo emérito de La Serena y miembro del Instituto de los Padres de Schoenstatt, medida que se hizo extensiva a Marco Antonio Órdenes Fernández, obispo emérito de Iquique.

A través de un comunicado, el Vaticano informó que en ambos casos «se ha aplicado el artículo 21 § 2, 2° del motu proprio ‘Sacramentorum Sanctitatis Tutela’, como consecuencia de actos manifiestos de abusos a menores».

De igual forma, desde la Santa Sede aseguraron que la decisión adoptada por el Papa Francisco el pasado jueves 11 de octubre «no admite recurso» de apelación.

La Congregación para la Doctrina de la Fe ha notificado esta situación a los dos ex religiosos, a través de sus superiores y en sus respectivas residencias.

Finalmente, la Iglesia de Chile señaló que Francisco José Cox Huneeus continuará formando parte del Instituto de los Padres de Schoenstatt.