Una alerta de bomba obligó a tres aviones que salieron desde el aeropuerto de Pudahuel, en la región Metropolitana, a desviar su recorrido para aterrizar de emergencia en diversos lugares de Sudamérica.

Todo ocurrió a eso de las 14:00 horas, cuando la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC) recibió una llamada anónima alertando sobre la existencia de explosivos en las aeronaves, que ya habían despegado minutos antes.

Esta situación originó la activación de los protocolos de emergencia, lo que derivó en que el vuelo 2369 Santiago – Lima debiera aterrizar de emergencia en la ciudad peruana de Pisco. Por su parte, el Sky 524 debió aterrizar en la ciudad argentina de Rosaia; mientras que el Sky 162 Santiago – Calama, debió regresar al terminal aéreo de Pudahuel.

Al respecto, el mayor de Carabineros, Diego Rojas, explicó que el avión que volvió a la capital «fue sometido a revisión por el GOPE y no se encontró ningún elemento extraño».

Finalmente, la policía uniformada pidió entregar algún tipo de información respecto a este llamado, con el objetivo de dar con los responsables del intenso operativo llevado a cabo y con el objetivo que no ocurren nuevas falsas emergencias.