El sacerdote condenado y suspendido por el Vaticano por abusos sexuales, Fernando Karadima, fue dado de alta luego de sufrir un infarto.

De esta manera, el religioso salió desde el Hospital Clínico de la Universidad Católica para dirigirse nuevamente hasta el hogar de ancianos San José, en la comuna de Lo Barnechea.

Cabe recordar que Karadima se encuentra en este lugar como sanción impuesta por el Vaticano en febrero de 2011, luego de ser condenado por una serie de abusos sexuales en nuestro país.

Como parte del castigo entregado por la Santa Sede, este sujeto no podrá efectuar ningún acto público embestido como sacerdote de la Iglesia Católica, pasando a una vida de oración y penitencia.