La Fiscalía Local de Talagante logró acreditar las denuncias de dos de las hijas de P.A.Z.Z. (42), padre de dos jóvenes que señalaron ser abusadas y violadas en reiteradas ocasiones por este hombre, entre 2005 y 2014, años en que eran menores de edad.

Según se dio a conocer en la audiencia, los hechos ocurrieron en dos domicilios de la familia en Talagante, mientras el hombre las tenía bajo su cuidado y la madre debía salir a trabajar.

Mediante una serie de pericias psiquiátricas y las declaraciones de las dos víctimas, las fiscales Roxana Fernández y María Teresa Herrera lograron demostrar que P.A.Z.Z. ejercía la dominación absoluta de la familia a través de la violencia y coerción y que, mediante amenazas físicas y de muerte impedía que las hijas revelaran los abusos.

El tribunal determinó condenar al acusado a presidio perpetuo simple por los delitos de abuso sexual y violación en carácter de reiterado de sus dos hijas, a 61 días por lesiones menos graves causadas a su hija mayor y a 61 días por las amenazas proferidas a su esposa una vez que quedaron al descubierto los hechos.