Esta mañana se dio por iniciado en la ciudad de Coyhaique el juicio oral contra Mauricio Ortega, único imputado de golpear y mutilar a su ex pareja, Nábila Rifo. Así, el acusado optó por entregar su versión de los hechos, desestimando la alternativa de guardar silencio que el tribunal del sur de nuestro país le otorgó, asegurando que «nunca le he pegado a mi señora».

En su extenso relato, Ortega contó que durante el día de la agresión a la mujer, ésta había bebido mucho y que comenzó a hostigar a otros presentes en un asado que estaban realizando. De hecho, el imputado aseguró que «todos se pusieron a bailar y ella se levantó la polera para mostrar los pechos. Ahí la increpé y le dije que se desubicó, pero no hice nada más porque alegar contra Nabila era tirar palabras al viento».

Momento seguido, el detenido aseguró que su ex pareja se había ido de la casa, presuntamente donde su madre, situación que era frecuente en ella, según explicó Ortega: «Ah, esta huevona se fue donde su mamá, dije, porque era típico de ella; se ponía a discutir y se iba». Acá se generó una discordancia con su primer relato, donde aseguró aquella vez que vio que Nábila tomó un taxi en compañía con sus hijos.

Cabe precisar que la Fiscalía está pidiendo 12 años y 183 días de cárcel por femicidio frustrado, 15 años por mutilación reiterada, 300 días por violencia intrafamiliar y 540 días por violación de morada.

En la cita, que se extenderá por varios días, la Fiscalía expondrá 24 pruebas documentales, 22 informes periciales, 63 testigos, 27 peritos y una decena de pruebas materiales.