Tras el terremoto de 1981, la sede de la junta de vecinos de la población Esmeralda, en el cerro Mariposas, quedó casi por completo destruida. El lugar, inaugurado en 1974, fue parcialmente abandonado y los habitantes se alejaron del inmueble. Esta vez, gracias al apoyo que les brindó el Fondo de Desarrollo Vecinal (FONDEVE) y el Fondo Social Presidente de la República, la junta de vecinos 142 de esta población pudo reinstaurarse y volver a ser ocupada.

El alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, destacó el esfuerzo de los vecinos al restaurar el lugar y convertirlo en un centro de encuentro y reunión de los mismos pobladores:

Han podido llevar esta unidad vecinal a buenas concursabilidades para poder hacer un trabajo con la comunidad. Así, han avanzado en las labores de limpieza, desmalezado y autocuidado y, hoy, en la reposición de los fondos de la Junta de Vecinos. Aquí se reunirán los Halcones de la H, el club deportivo Trinquete, Centros de Madres y otras organizaciones del barrio, por lo que ha sido una buena inversión que esperamos continúe».

Hasta antes de su completa reedificación, la sede se había ocupado para baby shower, velatorios, casamientos y cumpleaños; a lo que se sumarán eventos enfocados en el adulto mayor del sector y otras varias actividades. Osvaldo Nieto, presidente de la Junta de Vecinos 142, explicó que «tenemos el club deportivo, Halcones de la H, con disciplinas como judo y kárate. También lo ocupará el Centro de Madres, un grupo de zumba y gimnasia, y talleres realizados por un equipo de Conaf».

A la ocasión, también asistió el diputado y ex alcalde porteño, Aldo Cornejo, quien colaboró en la restauración de la nueva sede vecinal para sacarla de su precariedad.

Lo importante es, tal como lo hemos dicho, es que esto se use y cuide, ya que a veces los dirigentes se esmeran en postular a determinados proyectos para remodelar y mejorar el lugar, para que luego otras personas roben, destruyen y se ocupa poco. Este esfuerzo debe acompañarse por vecinos para ocuparse, y que sea un lugar de encuentro y no de desencuentro».