Nueve obras de artistas nacionales serán arrasadas para construir una farmacia en el sector. Ante esto, los vecinos se han visto fuertemente amenazados y han decidido tomar cartas en el asunto.

IMG_3993Esta semana, integrantes de la Agrupación de Juntas de Vecinos de Recreo se reunieron en calle Balmaceda con Diego Portales para demostrar su descontento ante la demolición de una de las casas históricas del sector, en donde también se demolerán unos murales pintados por artistas nacionales hace unos años atrás.

Los murales, que corresponden a 22 reproducciones de obras de artistas nacionales reconocidos, realizadas por Claudio Francia -contenidas en el libro de poesías de Gonzalo Villar-, tienen una ubicación que va desde el Cementerio de Caleta Abarca hasta la subida de Camino Real, en donde 9 de éstos serán demolidos para, finalmente construir una farmacia con otros negocios a su alrededor.

El trabajo se pudo llevar a cabo gracias a la entrega de los recursos postulados al Gobierno Regional, en conjunto con todo el proyecto realizado por las 17 juntas de vecinos. Corresponde al proyecto llamado “Muros que miran al mar”, conocido por los vecinos del sector como el museo a cielo abierto de Recreo, el cual día a día se ha convertido en una de las atracciones del lugar por turistas y vecinos.

Por lo mismo, los vecinos se han unido en esta lucha contra la demolición, para preservar uno de los barrios históricos y patrimoniales de Viña del Mar, en el que las inmobiliarias al igual que en Valparaíso han arrasado con las vistas de las casas y la belleza que se ha generado a su alrededor gracias a las costumbres de los vecinos, quienes han decidido cuidar hasta el último rincón.

Lo que piden estos vecinos, junto a la directora de la Galería Casa Verde, Myriam Parra, es que la empresa se haga cargo y repare el daño que causarán con la demolición del muro y compense con el financiamiento, volviendo así a reproducir los mismos murales afectados en otras zonas de Recreo, las que ya están vistas por los vecinos.

Unas de las cosas que también ha llamado la atención de éstos, es que es tanto el respeto existente hacia las pinturas por parte de las personas, que ni siquiera se han atrevido a rayarlos o a destruirlos, como ocurre la mayoría de las veces. Sin embargo, la empresa constructora retiró las placas en donde estaban escritos los nombres de los artistas y de las obras, con el fin de que éstas no fuesen robadas por terceras personas.

“Muros que miran al mar”

Myriam Parra es la directora de la Galería Casa Verde y curadora, quien durante años se ha preocupado de preservar la belleza arquitectónica y natural de Recreo, apoyando el arte y cultura.

“La verdad es que ha sido un impacto muy fuerte, porque “Muros que miran al mar” está constituido por 22 murales, pero este muro especialmente, era un muro emblemático para nosotros. Primero, porque aquí hay 9 obras de artistas reconocidos, valorizados y premiados en Chile. Además la comunidad los ha apreciado y los ha querido muchísimo, llevan un año y medio y nadie los ha rayado, los han respetado”, declara Myriam Parra.

Los autores presentes en la obra son: Klaudio Vidal, Francisca Núñez, Roser Bru y Gonzalo Cienfuegos, junto a Claudio Francia, quien adaptó las obras al formato del muro.

“Es demasiado violento que de repente por la venta de la casa y porque llega una empresa de retail, se vayan a demoler estas obras. Nosotros lo que queremos es que la empresa propietaria de la casa y los muros nos pueda restituir en términos económicos y poder plasmar los mismos murales en otros emplazamientos del barrio”, afirma la directora de Galería Casa Verde.

Mientras que Gonzalo Villar, quien editó el libro de poemas “Muros que miran al mar”, al igual que Myriam apoya la lucha de los vecinos por la recuperación histórica del barrio y la defensa ante la demolición del muro, afirmando que cada pintura se ha hecho parte de las personas, conociendo las historias de cada uno de éstos.

“Cuando se agrede el arte, el pensamiento de la cultura de una comunidad, se está agrediendo a una comunidad y si una cadena de farmacias viene acá a patear nuestras puertas, obviamente no va a ser bienvenida”, sostiene Villar, argumentando que el principal problema es que la sociedad ha dejado de lado la belleza natural, por una sociedad de consumo.

También compara la situación ocurrida en el cerro Esperanza, donde las inmobiliarias se intentaron apoderar de terrenos y construir grandes edificios, al igual que negocios comerciales, que finalmente se prohibieron debido al peligro patrimonial que los saldría afectando negativamente.

 “No queremos farmacia”

IMG_4941 Los vecinos del sector de Recreo se han agrupado para frenar la demolición de este muro que poco a poco ha destruido la belleza natural del sector y que ha permanecido así desde años atrás.

La presidenta de la Agrupación Junta de Vecinos, Alicia Salinas, comenta sobre la importancia que tienen estos murales para los ciudadanos de Recreo, quienes los han cuidado de las personas que han intentado rayarlos y de las constructoras que han pensado en demoler el lugar. Sin embargo, ahora con la noticia de una farmacia en el sector, los ha puesto en pie de guerra contra los propietarios.

“Nos sentimos tremendamente atropellados, en el sentido de que Recreo ha perdido su sentido patrimonial, ya no respetan nada. El proyecto es nuestro, nosotros lo postulamos, acogimos la idea del poeta Gonzalo Villar y si no fuera por nosotros, eso no hubiera salido. Por eso estamos aquí, para defender el muro, no queremos retribución económica, nosotros queremos preservar el muro, porque lo tomamos como algo muy nuestro”, sostiene Alicia Salinas.

 Así como el centro de Viña del Mar se ha ido plagando de farmacias, el centro de Recreo ya cuenta con una y es por eso que los vecinos del sector opinan que con una basta, ya que otra sólo sería para alimentar la codicia de las empresas y no beneficiaría a la comunidad en sí. “Yo creo que ellos quieren botar el muro para hacer un estacionamiento, entonces yo digo, ¿cómo es posible que vayan a botar un muro que tiene pinturas de famosos chilenos para hacer un estacionamiento? Entonces se ve que la codicia hoy puede más que todo”, comenta la presidenta de la agrupación.

 El orgullo por un sector que ha permanecido por los años sin construcciones de altura, que se ha vuelto un barrio, como bien dicen los vecinos, romántico y lleno de arquitectura antigua, con un sentido de barrio que se plaga en las casonas y en las calles.

“Nos enfurece saber que se va a instalar una cadena de farmacias, cosa que ya sabemos de antes que será una cosa horrible, porque todas son horribles, esas cosas no son edificios, son adefesios”, sostiene Carola Jamett, quien es vecina del sector y al igual que Alicia Salinas, no está a favor de la construcción de la farmacia y la demolición del muro que contiene las pinturas.