Desbordes negó cualquier implicancia en la filtración y afirmó que la información obtenida para la querella fue legal. La disputa sigue siendo una controversia pública que involucra a los políticos del Partido Comunista.
El comunicado detalla que los mensajes fueron obtenidos sin justificación investigativa y que, además, el alcalde Mario Desbordes mencionó el caso públicamente, lo que agrava la situación.