La Contraloría General de la República descubrió una serie de irregularidades en la entrega de la Tarjeta Nacional Estudiantil (TNE), en un informe detallado sobre el funcionamiento de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb). La auditoría identificó que 9.489 tarjetas fueron entregadas a personas que no acreditaron su calidad de alumno regular, lo que generó un gasto de 31.105.685 pesos.

El informe final N° 450 de 2024 muestra que la Junaeb ordenó la fabricación y pago de estas tarjetas sin verificar correctamente la condición de los beneficiarios. La entrega errónea afecta a casi 10 mil personas y ha motivado que la Contraloría fiscalice el monto invertido. Además, hasta enero de 2024, más de 78.000 credenciales no habían sido entregadas a las instituciones educativas.

La investigación también reveló que la fabricación de las tarjetas tuvo demoras significativas, con un tiempo de entre 7 y 27 días hábiles, y el proceso completo tardó entre 31 y 365 días corridos en completarse. En algunos casos, las tarjetas emitidas entre 2015 y 2023 seguían activas sin haber pasado por la revalidación anual. Adicionalmente, se detectó que algunas tarjetas ya estaban vigentes antes de ser entregadas a los estudiantes entre 2019 y 2022.

Otro punto crítico fue la revisión de inventarios en Oficinas TNE de cuatro comunas de la Región Metropolitana, donde se hallaron discrepancias, como una diferencia de 3.853 tarjetas y 118 sellos no contabilizados correctamente.