El papa Francisco, de 88 años, pasó una “buena noche” y descansa en el hospital, según informó el Vaticano este lunes. El Sumo Pontífice lleva 11 días hospitalizado debido a una neumonía en ambos pulmones, la hospitalización más larga desde su elección en 2013.

El comunicado del Vaticano destacó que el papa “durmió y descansa”, lo que representa una señal positiva en medio de su estado crítico. Jorge Mario Bergoglio, el primer papa americano, ha enfrentado numerosos problemas de salud en los últimos años, incluyendo dolores en la rodilla y la cadera, inflamación del colon y dificultades respiratorias.

En su juventud, el papa Francisco fue sometido a una ablación parcial de un pulmón, lo que ha agravado sus actuales complicaciones respiratorias. Desde 2022, se le ha visto desplazándose en silla de ruedas o con bastón, lo que refleja los desafíos físicos que ha enfrentado.

A pesar de su estado crítico, el Vaticano ha asegurado que el papa está recibiendo la mejor atención médica posible. Los fieles alrededor del mundo continúan enviando sus oraciones y mensajes de apoyo para su pronta recuperación.