Esval continúa avanzando en su plan para enfrentar los efectos del cambio climático, ampliando la autonomía y resiliencia del sistema de producción de agua potable de la planta El Sauce, que abastece a cerca de 27.000 familias en la provincia de Los Andes, en la región de Valparaíso.

Con este proyecto, la autonomía del sistema se ha extendido de 18 a 48 horas, permitiendo una mejor respuesta ante eventos de turbiedad extrema.

El gerente general de Esval, José Luis Murillo, destacó que el proyecto busca resguardar el servicio de agua potable frente a emergencias climáticas, como las altas turbiedades, que se han vuelto más recurrentes en los últimos años. “Ya contábamos con un respaldo de 18 horas y con estas nuevas obras, hemos logrado extender la autonomía a 48 horas”, explicó.

En esta misma línea, desde la sanitaria explicaron que durante esta temporada estival, el sistema ha superado sin inconvenientes tres episodios de turbiedad extrema en el río Aconcagua. “Cuando el río trae un alto contenido de sedimento y escombros, debemos suspender la captación de agua para proteger la infraestructura. Gracias a estas medidas, la comunidad no ha experimentado cortes de suministro”, agregó Murillo.

El Superintendente de Servicios Sanitarios, Jorge Rivas, calificó el proyecto como “bien encaminado” y destacó su importancia para robustecer el sistema de abastecimiento de la zona.

Para 2025, Esval planea conectar la planta El Sauce con un tranque de acumulación de 25.000 m³, fortaleciendo aún más la autonomía del sistema. Se espera que todas las obras estén operativas para la próxima temporada estival.