Una familia acusa al Hospital de Temuco de negligencia médica tras la muerte de un recién nacido, quien habría sido maltratado durante el parto. La madre, una joven de 20 años con diabetes y embarazo de alto riesgo, no fue sometida a una cesárea pese a las circunstancias.

El caso comenzó cuando la joven acudió al Hospital de Nueva Imperial para una ecografía, en la que se le informó que su bebé pesaba 3,5 kilos y no presentaba complicaciones. Sin embargo, solo horas después, en su hogar en Nehuentüa, rompió fuente y fue trasladada al Hospital de Temuco tras pasar por Carahue.

La abuela del bebé, Viviana Santander, declaró a Araucanía Diario que su hija pasó toda la noche en el hospital sin recibir una cesárea, a pesar de que su condición lo ameritaba. En medio del parto, los médicos descubrieron que el bebé pesaba más de 4,5 kilos y habrían aplicado maniobras de fuerza para asistir el nacimiento.

«Era una guagua gigante, era para cesárea. A mi hija le debieron practicar una cesárea por el puro hecho de haber tenido diabetes«, afirmó Santander. La mujer también relató que el bebé presentaba lesiones en el cuello, quedó en estado grave en la UCI y falleció tras tres horas.

La familia exigió una autopsia, en la que el equipo forense encontró anomalías en el cuerpo del lactante. Actualmente, la PDI está investigando el caso.