El pasado miércoles 5 de enero la Municipalidad de Quillota, a través de la Dirección de Deportes y la Oficina de la Inclusión de la Dirección de Desarrollo Comunitario (DIDECO), inició la 4ta versión del Taller de Surf Inclusivo con la colaboración de la Academia FreeSport, Centro de Formación Técnica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (CFT PUCV) sede Quillota, voluntarios y funcionarios municipales que apoyaron durante la jornada.
El objetivo del taller busca desarrollar parte de la terapia que reciben los usuarios del centro Kimche, programa establecido dentro de la DIDECO, logrando que las y los apoderados aprendan técnicas terapéuticas en el medio acuático.
Sandra Morales, directora de la DIDECO, a partir del Taller de Surf Inclusivo enfatizó que “todos los años estamos más contentos de realizarla, igual que las familias. Lo conversaba con algunas mamás que están con nosotros ahora y para ellos es un espacio súper importante para el desarrollo de sus hijos y de sus hijas. Para nosotros poder contribuir a que estos espacios que ayuden a las familias es importantísimo”.
En ese mismo sentido, Renato Arellano, director de la Academia FreeSport, comentaba que desde la academia trabajan hace 12 años en este ámbito, vinculando el proceso de la práctica deportiva con la nueva generación de deporte. De esta manera, utilizar el mar como recurso pedagógico, deportivo y turístico y de inclusión.

Johan Fuentes, psicólogo de la Oficina de la Inclusión, agrega que “finalmente esta actividad del Surf Inclusivo que ya llevamos por cuarto año consecutivo realizandola, finalmente  tiene este objetivo de carácter terapéutico pero de alguna manera también entendemos que repercute en todo ámbito, tanto a padres cuidadores, a los mismos beneficiarios y a los trabajadores”.
Asimismo, el psicólogo menciona la alianza que se ha generado con el CFT PUCV, específicamente, con la carrera de Enfermería, indicando que “desde el año pasado vienen trabajando con el taller de Surf Inclusivo, ellas nos pueden acompañar y brindar la seguridad de resguardar la salud de cada participante, finalmente, todos nos sentimos seguros de tenerlas aquí velando por nuestra seguridad”.

Las clases se realizan todos los miércoles de enero y febrero, donde los jóvenes tienen acceso a capacitación, traje, tabla y traslado a la playa La Boca. Estas instancias buscan fortalecer los vínculos con el medio, experimentación sensorial y otros ámbitos que complementan las terapias que desarrolla la Oficina de la Inclusión a sus beneficiarios.