El viernes 21 de octubre, vecinos de las juntas de vecinos 18 Hospital, Patricio Cerda y 34 de forestal bajo, Jaqueline Adriasola, presentaron una carta en el municipio dirigida a la alcaldesa Macarena Ripamonti y el concejo municipal, dando a conocer el rechazo al proyecto de instalación de toldos en sector Hospital Gustavo Fricke.

“Hemos ingresado una carta dirigida a la alcaldesa con copia a los concejales de la comuna, firmada por dirigentes vecinales tanto del sector de Forestal de la agrupación de junta de vecinos en Chorrillos también y, por cierto, de la junta de vecinos 18 hospital, manifestándole por escrito a la alcaldesa nuestro absoluto rechazo a la idea de instalar comercio ambulante en ese sector. Nos interesa que ese espacio quede liberado para el libre tránsito de las personas, nos interesa que el comercio efectivamente sea regularizado, que sea gente que pague permiso, que pague las patentes, pero también no interesaba generar una discusión con respecto al espacio público que van a ocupar sentencia Patricio Cerda.

Para los dirigentes es importante generar coordinaciones de la casa consistorial con carabineros para poder despejar el sector en el marco de la ley 21.426 que fue recientemente aprobada, es decir, que se coordine con los distintos servicios, con las fuerzas policiales para generar el despeje del sector.

“Nosotros como vecinos del lugar, estamos muy preocupado por situaciones de inseguridad del espacio, es una vereda que se ha transformado en un pequeño pasaje porque hay comercio instalado por ambos lados y que no permite el libre tránsito de las personas, donde carabineros no ha hecho la fiscalización correspondiente y, obviamente, por el tema de higiene nos preocupa que se vendan productos que son perecibles, también el libre tránsito que se produce entre los funcionarios que entran y salen del hospital Gustavo Fricke con todos los riesgos sanitarios que eso significa y además, hacemos un acto de solidaridad con el comercio establecido que paga patente, que paga permiso y que en definitiva, hace pago que corresponde al comercio instalado, no así quienes están esporádicamente instalado en la acera de calle Álvarez y calle Simón Bolívar”, concluye Cerda.

REUNIÓN CON EL EQUIPO MUNICIPAL

Todo inicia luego de recibir una invitación como dirigentes vecinales del sector en cuestión, a una reunión citada por la Coordinadora de Gestión Cívica del municipio y su equipo. La idea era poder conversar con respecto al tema del comercio ambulante que está instalado en el sector del Hospital Gustavo Fricke.

“En la ocasión nos atendió la señora Camila Estay que es la coordinadora que nos hizo una presentación breve con respecto a cuál era la idea que ellos tienen para el desarrollo del comercio en ese lugar, para nuestra sorpresa y lamentablemente nuestra intención o, por lo menos la de la junta vecinal 18 la cual yo represento, era conversar sobre cuál era el criterio que tiene el municipio con respecto al desarrollo en espacio público. Lamentablemente la reunión fue una notificación de lo que ellos pretenden realizar ahí: ellos quieren instalar 20 toldos de 2 por 2 metros, con un diseño en el mismo lugar y nada se dijo, por ejemplo, con respecto a los quioscos que están instalados en el lugar y uno de los argumentos que se ocupó es que ellos van a autorizar la venta de productos que no se encuentran en el sector”, 

El dirigente señala que para quienes viven en sector, conocen perfectamente que alrededor del Hospital Gustavo Fricke hay comercio de distinto tipo: farmacias, restaurantes, cafeterías, verdulería, botillerías que llevan años instalados, que pagan impuestos, pagan permisos municipales, arriendo y que además se somete a la fiscalización sanitaria de ser necesario, en definitiva muchas exigencias, opinión que querían entregar en la cita pero que   lamentan, pues se pretendía dar otro uso a ese espacio por parte de los vecinos, liberarlo para el libre tránsito de la gente que concurre al recinto hospitalario, pero además para el libre tránsito de todos los peatones del sector, ya que esgrimen tener mucha población transitante de adultos mayores, personas con discapacidad física, que se deben enfrentar a veredas reducidas y a la suciedad acumulada, entre otros factores que pueden evidenciar a diario.