Una polémica se desató en Argentina este sábado tras amanecer una valla policial rodeando la casa de la vicepresidenta Cristina Kirchner.

Un centenar de personas las que marcharon en Buenos Aires en protesta por la instalación de esta valla, luego que un fiscal solicitara una pena de doce años de prisión y la inhabilitación perpetua para que la ex presidenta argentina para ejercer cargos públicos.

La medida de las vallas perimetrales en torno al domicilio de Fernández fue parte de las medidas dispuestas por el Gobierno de Buenos Aires, liderado por el opositor Horacio Rodríguez Larreta.

Cristina Fernández alegó en su página web que este sábado la esquina de su domicilio en Recoleta, se encontraba “literalmente sitiada”.

“Las vallas colocadas por el señor Larreta son algo más que impedir la libre circulación, son algo más que sitiar a la vicepresidenta de la nación. Quieren prohibir las manifestantes de amor y de apoyo absolutamente pacíficas y alegres que tienen lugar ante la ya inocultable persecución del partido judicial”, aseguró Cristina.

Desde el Gobierno, el jefe de gabinete, Felipe Miguel, detalló a la prensa local que la instalación del vallado tiene por objetivo “garantizar la circulación” de los vecinos del sector.

“Los gobiernos tenemos la responsabilidad de garantizar el orden público. Acá vimos que progresivamente, en las últimas 48 horas, se habían organizado sistemáticamente para turnarse, llegaban personas, tuvimos batucada, feria, ruidos hasta las 2 de la mañana… La gente tiene que poder vivir con tranquilidad”, recalcó la autoridad.