En conferencia de prensa, el Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, aseguró que el estado de excepción en su país no se levantará “antes de acabar la guerra contra las pandillas”, pero indicó que no esperan “que dure una década”.

Su declaración se dio luego que se consultara sobre la postura de Estados Unidos de que el régimen, que suspende derechos constitucionales, es una política “insostenible”.

“Evidentemente el régimen de excepción es de excepción, no va a durar para siempre” y “no esperamos que dure una década, pero tampoco los vamos a quitar en dos, tres meses antes de acabar la guerra contra las pandillas”, subrayó el Jefe de Estado salvadoreño.

Para Bukele, “las pandillas son como un cáncer con metástasis” y que el régimen de excepción y la “guerra contra las pandillas” es la quimioterapia.

Para el Presidente de El Salvador, las pandillas son un “enemigo” que está “adentro de las comunidades» y «adentro de la misma población”.

El Estado de Excepción tiene lugar en El Salvador después de que durante el último fin de semana de marzo se registrara una ola de asesinatos donde fallecieron 87 personas, hecho atribuido a las pandillas.

A la fecha, son más de 43.000 las personas detenidas bajo este régimen.