El próximo lunes 14 de febrero, se dará inicio al juicio en el caso de Alejandro Correa, el empresario de Concón quien presuntamente habría sido asesinado por sicariato el 19 de mayo del 2020 en las puertas de su domicilio.

Se presume que el asesinato estuvo ligado a conflictos por un terreno en Quilpué.

Tras el trabajo realizado por Fiscalía, se estableció que Renato López fue quien pagó por los servicios de sicario, quien sería Luis Alarcón.

Una de las hijas del empresario, Valentina Correa, dio a conocer su padre compró un terreno de 12 hectáreas en Quilpué a finales de los años 90 a modo de inversión.

Décadas más tarde, un grupo de personas comenzó a tomarse los alrededores del terreno, sin que se llegara a un acuerdo para el desalojo.

Luis Alarcón, quien se autodenomina “asesor de tomas” vio como una dificultad seguir realizando acciones en el sitio ya que contaba con un dueño.

Tras la muerte del empresario, Alarcón remató el terreno, construyéndose una casa en el lugar.

Son 12 hectáreas que no ha podido recuperar la familia, teniendo los papeles legales como propietarios.

El próximo 14 de febrero, la familia apelará a las responsabilidades por el asesinato, pero el problema por la ocupación de terreno sigue sin solución.