Hace casi un año, el país se paralizó con la desaparición y muerte del pequeño Tomás Bravo.

Esta jornada, Marcela Cartagena, fiscal regional del Bío bío, hizo un mea culpa respecto a la investigación del caso, destacando la existencia de seis diligencias en proceso para esclarecer la muerte del menor.

Cartagena, detalló que durante este primer semestre se entregará un nuevo informe para evitar nuevos errores en indagatorias similares.

La persecutora señaló que la indagatoria tiene tres aristas: La primera de ellas tiene directa relación con la muerte de Tomás Bravo. En tanto, la segunda se encuentra vinculada a la búsqueda del menor, en la que se investiga las acciones de aquellas personas que participaron en la búsqueda.

“En febrero conocimos el caso de un niño, cuya dignidad debe ser cuidada. Si bien la comunidad demanda justicia, estamos frente a una investigación de la más alta complejidad que nunca habíamos vivido en la región», sostuvo la fiscal Cartagena.

Como forma de autocrítica, la fiscal detalló que las indagatorias tienen “múltiples factores, algunos de ellos sobre el o los hechos relacionados a la muerte, otros por su búsqueda y lo último se relaciona con las determinaciones de los actores que participan en la búsqueda“.

Además dio a conocer que existen seis diligencias en curso, en Chile y en el extranjero, acumulando la investigación a la fecha ya 20 tomos.

“Deberán crearse los protocolos para evitar errores semejantes. No excluimos a la Fiscalía del Biobío de esto. Un informe completo estará sobre los escritorios de todos los actores en el primer semestre de este año”, aseveró Cartagena.

Finalmente, sobre las filtraciones del caso, la persecutora aseguró que “las investigaciones son secretas, sólo los intervinientes pueden conocer detalles. Las víctimas de esta investigación tienen cabal conocimiento de los pasos de esta causa y han propuesto diligencias”.