El líder norcoreano tomó hace una días una insólita decisión .

Según señalan medios locales, Kim Jong-un prohibió que por 11 días existan en el país, risas y gestos de felicidad.

Se informa que esta medida tiene directa relación con el décimo aniversario de su padre, Kim Jong-Il.

En conversación con Radio Free Asia, un ciudadano de la ciudad Simuiju detalló que a parte de no poder reír, ningún habitante del país podrá participar en actividades de ocio o beber alcohol.

Esta medida comenzó el pasado 17 de diciembre, teniendo prohibido comprar en el periodo comestible.

Incluso si su familiar muere durante el período de luto, no se le permite llorar en voz alta y se debe sacar el cuerpo después de que haya terminado. La gente ni siquiera puede celebrar su propio cumpleaños si cae dentro del período de luto”, detallaron a la radio asiática.

De romperse estas reglas, la policía tiene la orden de “tomar medidas enérgicas”, aunque para ellos estos días tienen a parte otra importante regla que cumplir: no pueden dormir.