Luego de participar en las elecciones de 2017 como candidata a consejera regional por la región de Valparaíso, busca ser electa como diputada del Distrito 7 en las próximas elecciones del 21 de noviembre. 

Con un cupo del Partido Socialista, la abogada se define en sus redes sociales como “feminista y a favor de un Chile Plurinacional”. Para conocer aún más de ella, Epicentro Chile conversó  con la candidata.

Una de sus frases es “podemos hacer las cosas bien, podemos hacer las cosas distinto”, ¿podría explicar a qué tipo de cambio se refiere? 

Yo soy una militante del Partido Socialista desde hace muchos años, pero entiendo también esta brecha que se ha generado entre, la mal llamada, la élite política y los problemas cotidianos de las personas. Entonces, yo soy una convencida de que los problemas políticos se solucionan con más política, pero para aquello tenemos que cambiar la forma de hacerla, una forma más participativa, más transparente, que es lo que hoy la ciudadanía demanda: El cambio o tránsito de una democracia representativa a una participativa, donde las decisiones se toman en conjunto. Hoy, encarno una generación una forma de hacer política distinta, la cual quiere dar una solución a la crisis que venimos arrastrando. 

También me refiero a hacer las cosas bien, apelando a la ética política. Hoy tenemos que ser coherentes entre nuestro discurso y lo que hacemos, porque justamente el reproche de la ciudadanía tiene que ver con la falta de coherencia.   

Durante estas rondas de entrevistas, hemos conversado con diversos candidatos, quienes reclaman que uno de los principales problemas de la región es el poco o nulo cuidado al medioambiente. En ese sentido, usted llama a que se necesita conciencia ambiental, ¿propone alguna ley que castigue acciones que vayan en desmedro o que afecte a éste? 

No soy partidaria de las conductas sancionatorias, a mí no me gustan las normas que sancionan conductas. Yo prefiero normas que trabajen en una propuesta de construcción y, en ese sentido, la deuda medioambiental que Chile tiene es dotar de una nueva institucionalidad a nuestra toma de decisiones. Actualmente, desde que el primer gobierno de la Presidenta Bachelet creó el ministerio del Medio Ambiente, al día de hoy, todavía no hemos superado el hecho que las decisiones se toman de un punto de vista político: el ministro de ese cartera y los seremis del ramo en las comisiones del medioambiente. Hoy el desafío es tomar decisiones de carácter técnico, porque el calentamiento global y los desafíos que nos impone la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como país -con la agenda de desarrollo sostenible- son temas científicos y técnicos, los cuales no pueden ser guardados en el bolsillo por una decisión política. 

Por ello, en vez de buscar normas que sancionen conductas, tenemos que crear nuevas normas que vayan en este sentido: ser más técnicos y más coherentes con los desafíos a nivel país y económicos.          

 

Ante una eventual victoria en las próximas elecciones del 21 de noviembre, ¿en cuáles aspectos podría usted comprometer su voto?

Fuertemente con el tema de la descentralización. Yo creo que ello no solamente es cortar el vínculo con la región Metropolitana, o con la capital del país, sino que también tomar decisiones fuera de las capitales regionales y más cercanas a las comunas del territorio. En ese sentido, me gustaría modificar la ley orgánica de municipalidades y generar la figura del delegado municipal como un ente obligatorio, que represente las localidades más alejadas de la zona de expansión urbana o definitivamente rural, y se siente junto al alcalde y al consejo comunal a tomar decisiones que vayan en beneficio de los sectores más alejados. 

También como ciudadana de una ciudad puerto, me interesa modificar la ley de puertos para lograr el royalty portuario. Creo que tenemos que lograr que los puertos tributen en el territorio donde se sirven, y que no solo vivamos las externalidades y lo negativo, sino que también aprovechemos las ganancias del sector portuario.       

 

En relación a la seguridad, los portonazos, encerronas, sicariatos y los diversos hechos delictuales que se registran en la región y en todo el país, ¿cree que hay que implementar modificaciones en relación al Código Penal? 

No, yo no tengo esa mirada. Yo creo que los problemas hoy de seguridad pública y el problema de aumento, quizás, en algunos delitos tienen que ver con la precariedad que nos tiene fracturado el modelo. Producto de la revuelta social y el Covid-19, nos dimos cuenta que vivimos en una sociedad muy fragmentada, con mucha desigualdad, y ello significa que hay muchos ciudadanos que quedaron al margen del Estado, no les llegó ese supuesto crecimiento económico. Por lo tanto, son ciudadanos bastante marginados, lo que trae aumento de ciertos delitos, que tienen que ver con la República, bienes y las violencias en las personas. 

Sin embargo, la solución no es endurecer las penas ni aumentar el número de cárceles. La solución es trabajar en las causas que dan origen a ese aumento de delitos. Entonces, tenemos que fomentar y tener una educación profunda, para que nuestros niños, tras terminar su escolaridad, se le acabe el porvenir y la posibilidad de surgir. Si abordamos el tema como un todo, como una solución colectiva, vamos a tener a largo plazo una reducción en los delitos que hoy día están preocupando a las personas.

 Como usted ya lo ha mencionado, su postura no es sancionatoria, ¿cuál es su posición respecto a la macrozona sur y la solución definitiva a este problema lleva tantos años?

Este tema lleva más de 150 años. Primero que todo, yo creo que debemos abandonar la nomenclatura de referirnos a La Araucanía y a la Wallmapu como Macrozona sur, porque es una denominación que tomó Carabineros de Chile para disponer el traslado de tropas. Entonces, nuestra zona ciudadana tiene que ver con la región de La Araucanía. A como tratamos, es a como también recibimos respuesta. 

Hoy, la Convención Constitucional, la cual se declaró de origen plurinacional, nos da cuenta que vamos a tener un Chile plurinacional, y eso significa reconocer derechos políticos colectivos en nuestras primeras naciones, principalmente a nuestro pueblo mapuche (…) En consecuencia, vamos a devolver ciertas autonomías que antes, cuando gobernaba la corona española, dicho pueblo tenía. 

Este problema nació con la República, cuando decidimos que ciertas élites gobernaran  y pasaran por encima a nuestro pueblos originarios. Si hoy volvemos al tema de nuestros pueblos y de la zona de La Araucanía, desde un punto de vista político, vamos a bajar la intensidad de la violencia política que hoy se vive, la que tiene que ver con una respuesta al trato militarizado que tiene el gobierno de Chile con la zona.   

¿Por qué  deberían votar por Susana Calderón el próximo 21 de noviembre.

Primero que todo, hacer una invitación a la participación electoral. Hoy, los desafíos que Chile enfrenta, principalmente de mano con la Convención Constitucional, tiene que ver con la creación de un nuevo Chile, y para eso, todos somos necesario, todas las miradas. Por eso, la participación del próximo 21 de noviembre es trascendental para legitimar, poco a poco, las distintas transformaciones. 

¿Y por qué votar por mí?. Porque yo represento una candidatura de centro izquierda, socilista, de base trabajadora, respetuosa de los Derechos Humanos, de los pueblos originarios, de la equidad de género, del trabajo y del nuevo trato por el medioambiente. Por lo tanto, hoy, quien conoce el territorio de una mirada más social y más humana requiere del apoyo de todos y todas. Por lo tanto, los invito a respaldar mi candidatura, y el próximo 21 de noviembre votar el Nuevo Pacto Social, número 84.