Señor Director:

 

Al igual que en Europa, Chile ha sido invadido por millones de individuos sin relación alguna con su identidad nacional. ¿Qué sucedió con el “derecho” a la auto-determinación? Se ignora. Pues en Chile los gobiernos son meros títeres de la sátrapa élite mundialista. Así, se montó la avalancha irrefrenable de los “migrantes”, vulnerando las normativas de la “visa de turismo” y con la complicidad de los agentes de fronteras y la llamativa “regularización” del funesto gobierno de Sebastián Piñera.

 

Se trata de la invasión de Haití –el país más pobre del hemisferio occidental– a Chile, realizado bajo el mote del “derecho a migrar”, de la “inclusión” y del “globalismo”, ante la indiferencia y displicencia total del Ejército, la complicidad del Congreso Nacional y especialmente, la indolencia del afamado pueblo.

 

Veremos en un futuro no lejano un “estallido social” –entrecomillas– de los ‘nuevos’ chilenos exigiendo la abolición de nuestras fiestas patrias –como la Independencia, el 21 de Mayo o el Día de la Virgen del Carmen– por constituir efemérides nacionales, es decir, criollas, de “chilenos antiguos”, oposición natural y directa a la nueva sangre, a la nueva “cultura”.

 

Como en una operación de “vudú”, la población chilena ha sido hipnotizada y no se ha percatado de la aparición en nuestra propia tierra de la “Nueva Haití”.

 

Rafael Videla Eissmann